1) Nos ayuda a prevenir la diabetes, ya que controla los niveles de azúcar en la sangre.
2) El té verde es una fuente rica en cuanto a antioxidantes, por lo que permite controlar el envejecimiento prematuro de la piel, entre otras virtudes.
3) Emerge como un buen aliado para regular los niveles de colesterol malo en la sangre. Consumir con regularidad té verde disminuye las dolencias de tipo cardíaco.
4) El hígado agradece que tomemos té verde, ya que una taza de esta infusión al día posibilita limpiar el órgano responsable de filtrar las toxinas que se acumulan en los vasos sanguíneos. Además, ayuda a depurar la ingesta de bebidas alcohólicas y previene que el hígado se inflame.
5) Según los expertos, el té verde estimula el metabolismo y facilita la pérdida peso. Y es que cuenta con una gran capacidad para quemar calorías. A ello se suma su efecto laxante, que permite combatir el estreñimiento. Por consiguiente, reduce los gases y la hinchazón del abdomen.
6) Además de fortalecer el sistema inmunitario, tomar té verde ayuda a regenerar los huesos. Esta infusión tiene una poderosa acción analgésica y antiinflamatoria. Por lo que viene muy bien para tratar afecciones óseas como la artritis y evitar que la dolencia no vaya a más.